Poner todos los ingredientes en una olla profunda y llenarla de agua hasta tres cuartas partes.
Reducir el calor a que hierva ligeramente y cocinar tapado por dos horas.
Quitar la tapa y dejar hervir por otra hora; después, pasar el caldo por un colador y repartir en diversos recipientes.
Enfriar y guardar con todo y la capa de grasa que se le formará en la superficie, para que se conserve mejor.
Al momento de usarlo retirar la capa de grasa y emplearla con otros fines.