Se pone a cocinar la leche, cuando esté caliente se le agrega la masa, se deja cocinar a fuego lento por 30 minutos, revolviendo suavemente, se le agrega el azúcar y la canela. Una vez diluido el azúcar se sirve frío o, más frecuentemente, caliente.
Es tan popular el peto entre los sucreños que hay numerosos vendedores ambulantes que lo ofrecen por las calles. Lo transportan en ollas con una hornilla de carbón adherida a la base, y lo venden servido en vasitos a los transeúntes.
Tomado del libro Gran Cocina Colombiana, de Carlos Ordonez