Se cocinan las mollejas en agua que las cubra por 40 minutos a fuego alto hasta que estén blandas, se sacan y se les remueve el pellejo que las cubre. Se pican en cuadritos y se bañan en jugo de limón, se escurren de nuevo y se rebozan en harina de trigo y se dejan reposar.
Se calienta la mantequilla mezclada con el aceite, se ponen a sofreír las mollejas, las cebollas y las hierbas con sal y pimienta, se saltean constantemente, se les rocía el vino y se siguen salteando por 3 minutos. Se sirven sobre arroz blanco.
Tomado del libro Gran Cocina Colombiana, de Carlos Ordonez