Para preparar el saltimbocca corte el queso en 6 piezas. Pique finamente el ajo y corte cada lonja del prosciutto a la mitad. Reserve aparte.

Corte cada pechuga de pollo en 3 partes iguales y espolvoreé con pimienta. Ponga cada hoja de salvia en la mitad de la parte superior de cada pechuga, seguido por el queso y el jamón. Cubra con una envoltura plástica y aplane a poco menos de medio cm.

Para cocinar el saltimbocca, pre caliente una sartén a fuego medio alto. Agregue el aceite y cuando esté caliente, ponga el pollo con el prosciutto hacia abajo. Mueva la sartén periódicamente. Una vez el pollo se despegue es el momento para dar vuelta. No se preocupe si el queso empieza a expulsar un líquido durante la cocción, esto hará que la salsa quede aún más sabrosa. Compruebe el punto de cocción y ponga en un plato, cubra suavemente con papel aluminio sin apretar demasiado.

Asegúrese que la sartén tenga aceite, si no, agregue un poco si es necesario para seguir con las tandas restantes. Una vez todo el pollo esté listo, descarte el exceso de aceite. Retire del fuego y agregue vino, ajo, y deje hervir a fuego lento. Raspe los bordes de la sartén. Debe reducir hasta obtener 2 cucharadas.
La salsa debe tener consistencia de almíbar y un brillo agradable. Luego agregue el caldo y deje hervir otra vez hasta que se reduzca a la mitad. Una vez la salsa logra la consistencia de almíbar nuevamente, agregue la mantequilla fría y mezcle suavemente hasta que todo se haya combinado. Agregue el zumo de limón y sazone.
Ponga el fuego en bajo y retorne el pollo a la sartén, vierta todo el jugo acumulado y trate de cubrir todos los lados del pollo con la salsa. Ponga en un plato, vierta salsa en la parte superior y sirva.