Macera el ajo con un puñado de sal, orégano y pimentón;
corta el cazón en rodajas y colócalas en un plato mediano con la mezcla que acabas de hacer y un vaso de vinagre. Deja macerar el cazón por ocho horas.
Ahora, debes tomar el pescado y pasarlo por un poco de harina, luego coge una sartén con aceite de oliva y fríe las rodajas de cazón durante 4 minutos o hasta que estén doradas.
Cuando estén listas, retíralas y escúrrelas.